Oye niña
Oye niña
Oye niña, espabilate,camina, corre, vuela, pero hazlo ahora
porque para andar despacio, ya pronto te ha de llegar la hora
No desprecies los besos que hoy te hacen soñar
porque, de seguro…mañana los habrás de anhelar.
No dejes tu juventud evaporarse
como nube de humo que vemos elevarse.
Por ideas de otros no te dejes llevar
Rie y rie, tómale ventaja al tiempo de llorar.
No olvides, con frecuencia medirte la cintura
porque si te descuidas pierdes la figura.
y cubre tus oidos o finges estar sorda
cuando un día te digan…Oye…mira que estás gorda.!
Por eso niña …disfruta la vida a toda plenitud
porque, cuando te des cuenta “puff”se fue la juventud
No te dejes llevar por los que saben mucho
que esos…todo lo que saben… cabe en un cartucho.
Pero… tampoco tus pasos de lo recto desvíes
pues la vida es como el hielo que al calor se deslíe.
No dejes que te envuelvan amargos sinsabores
pues no hay nada más triste que un jardín sin flores.
No dejes que te aflijan los pequeños problemas
porque de esos, la vida… la tendrás siempre llena
Trata de alejarte de lo que te mortifique
y deja que la gente… hable y te critique.
Alejate si puedes de todo lo convulso
y nunca reacciones con violentos impulsos
En la vida hay de todo…pero sólo es eterno
la luz del paraiso… y la sombra del infierno
Procura no caer en aguas de un pantano
y que nunca te falte de un amigo la mano.
ya verás tu belleza como de ti se aleja
cuando veas en tu espejo, “la foto de una vieja”.
Sácale buen producto a estos años felices
porque después de ellos vienen los años grises
Y ten cuidado… no te vonviertas en una peleona
para que no te quedes vieja y solterona.
Disfruta lo que puedas en tus años sutiles
antes que palidezcan tus rosados abriles
Vive la realidad…no vivas de caprichos
y recuerdate siempre… de lo que aquí te he dicho
Cuando te sientas sola
CUANDO TE SIENTAS SOLA…
Cuando te sientas sola…acuerdate de mí
cuando te haga falta un hombro para sollozar…
y busques un amigo en quien poder confiar…
cuando creas que todos se olvidaron de tí.
No llores como el mar cuando perdió una ola
que al llegar a la playa…no quiso regresar…
no te sientas triste…no rompas a llorar
y acuerdate de mi cuando te sientas sola.
Rebusca en tu pasado los momentos felices
hecha a un lado los amargos, y los grises.
y no dejes que el viento marchite tu corola
Como la flor aquella que se quedó mustia
y para mitigar tu pesar y tus angustias…
acuerdate de mi cuando te sientas sola.
SI LA VES ...DILE
que he desaparecido como fugaz estrella
que nunca sepa si existo o si no existo
y que nunca sepa que he llorado por ella.
Es mejor así…que ella nunca sepa
que aún no se han curado las viejas heridas
que han rebozado el balde para que en el no quepa
ni la sombra de un adios o de una despedida.
Si la ves, dile que no…que no sabes nada
si acaso te pregunta ignorala, no la escuches
que tengo todas sus mentiras bien guardadas
cerradas con llave en mi secreto estuche.
No le creas no…nada de lo que ella dice
porque ella solo dice palabras baldías
ella va por un rumbo de variados matices
y ya hasta el sol le niega la claridad del día.
Ya el rio no corre como antes corría
ya el valle ha marchitado sus encantos
y mi vida es un mundo de agonía
de tristezas…de pesares y quebrantos.
Si la ves, dile que se ha roto el puente
que una vez cruzamos para vernos
que el paso del otoño y de frios inviernos
han hecho mi vida diferente.
Si la ves dile., lo que piensa la gente
que preguntan por ella por que ya no nos ven
y aunque a veces parece que el mundo nada siente
pero a veces si siente y padece tambien..
Si la ves dile…NO…mejor… no le digas nada
déjala en su camino… y que por el se valla…
déjala que siga por la ruta equivocada
que a veces se dice mas…cuando uno calla.
Historias
Historias para reflexionar
VER PARA CREER
Estaban un astronauta y un neurocirujano muy reconocido, discutiendo sobre
la existencia de Dios.
El Astronauta dijo: Tengo una convicción, No creo en Dios. He ido al espacio varias
veces y nunca he visto ni siquiera un ángel.
El Neurocirujano se sorprendió, pero disimuló. Luego de pensar unos instantes,
comentó: Bueno, he operado muchos cerebros y nunca he visto un pensamiento.
SER HUMILDE
Caminaba con mi padre cuando él se detuvo en una curva y después de un pequeño
silencio me preguntó: -Además del cantar de los pájaros, ¿Escuchas alguna
cosa más?... – Agudicé mi oído y algunos segundos después le respondí:
Estoy escuchando el ruido de una carreta.
Eso es- dijo mi padre-. Es una carreta vacía.
Pregunté a mi padre: ¿Cómo sabes que es una carreta vacía, si aún no la vemos?
Entonces mi padre respondió: Es muy fácil saber cuando una carreta está vacía,
por causa del ruido. Cuanto más vacía la carreta mayor es el ruido que hace.
Me convertí en adulto y hasta hoy cuando veo una persona hablando demasiado,
interrumpiendo la conversación de todos, siendo inoportun@ o violent@,
presumid@ de lo que siente y sintiéndose prepotente, tengo la impresión de
oír la voz de mi padre diciendo:
“Cuando más vacía la carreta, mayor es el ruido que hace.”
CONSECUENCIAS
Un niño acaba de ser descubierto en una mentira. Su padre, comprensivo y moderno,
sabe que no es importante esa mentira sino el concepto moral del mentir.
Por este motivo el padre deja de hacer lo que estaba haciendo, se para frente
al niño y comienza a explicarle en un lenguaje sencillo por qué tiene que decir
siempre la verdad: -Hijo, no importan la consecuencias, las mentiras siempre
traen problemas y acarrean más mentiras.
Cada vez que mientes la confianza de los otros hacia ti se va perdiendo, es como
un vaso que se va trizando, hasta terminar por romperse.
Después, aunque intentes repararlo, nunca quedará igual.
Mientras el padre terminaba su explicación suena el teléfono y el niño, como
una forma de disculparse por el error cometido, dice: -¡Yo voy!
– Y corre a atender. -Es el corredor de seguros, papi.
-¡Ufa!, justo ahora, dile por favor que no estoy.
¿¿¿¿.....????
EL ARBOL DE LOS PROBLEMAS
Un carpintero que había contratado para ayudarme a reparar una vieja granja,
acaba de finalizar un duro primer día de trabajo. Las cosas no le salieron
muy bien, su contadora eléctrica se dañó y lo hizo perder una hora de trabajo
y su antiguo camión se negaba a arrancar.
Ofrecí llevarlo a su casa y mientras íbamos en camino permaneció en silencio.
Una vez que llegamos me invitó a conocer a su familia.
Mientras nos dirigíamos a la puerta, se detuvo brevemente frente a un pequeño
árbol, tocando en las puntas de las ramas con ambas manos.
Cuando se abrió la puerta, ocurrió una sorprendente transformación:
Su bronceada cara estaba plena de sonrisas.
Abrazó a sus dos pequeños hijos y le dió un beso a su esposa.
Posteriormente, me acompañó hasta el auto.
Cuando pasamos cerca del árbol sentí curiosidad y le pregunté,
acerca de lo que le había visto hacer un rato antes.
El me contestó: Ese es mi árbol de problemas.
Sé que no puedo evitar tener problemas, pero no pertenecen a la casa,
ni a mi esposa, ni a mis hijos. Así que simplemente los cuelgo en el árbol cada
noche cuando llego a casa. Luego en la mañana los recojo otra vez.
-Lo divertido es, dijo sonriendo, que cuando salgo en la mañana a recogerlos,
ni remotamente hay tantos como recuerdo haber dejado la noche anterior…
Franastur 28-02-2010